Vamos a
preparar una receta muy fácil que combina los beneficios de los guisantes con
el sabor de un buen jamón ibérico.
Los guisantes
pertenecen a la familia de las leguminosas, son una fuente importante de
nutrientes como la proteína vegetal, la fibra, además de vitaminas y minerales.
No aportan grasa, sólo muy pocas calorías, por lo que son muy recomendables en
las dietas para bajar de peso.
Gracias al
aporte de fibra los guisantes ayudan
a controlar el peso porque mantienen la sensación de saciedad por más tiempo.
Reducen los niveles de colesterol en
sangre.
Ayudan a satisfacer las necesidades de hierro.
Reducen el colesterol y mejoran
la salud del corazón.
También gracias
a la luteína y la vitamina A ayudan
a proteger a los ojos de enfermedades como cataratas y degeneración macular,
ayudando a prevenir la oxidación.
INGREDIENTES
1 kilo de
guisantes.
200 gramos de jamón
ibérico D.O. Guijuelo.
1 cebolleta grande.
2 dientes de
ajo.
4 yemas de
huevo.
AOVE.
Sal.
Pimienta negra.
PREPARACIÓN
Primero pelamos la cebolla y los dientes de ajo. Picamos ambos.
Echamos AOVE en una cacerola, doramos la cebolla y el ajo.
Una vez la cebolla y el ajo adquieren color echamos los trozos de
jamón y damos vuelta un minuto. No dejéis que los tacos se doren demasiado sino
los guisantes tendrán un sabor demasiado fuerte.
A continuación echamos los guisantes y ½ vaso de agua, llevamos a ebullición. Tapamos. Bajamos el fuego al mínimo y salpimentamos levemente. Si veis que los guisantes no sueltan suficiente agua echad más. Cocemos hasta que los guisantes estén en su punto. Corregimos de sal.
A continuación echamos los guisantes y ½ vaso de agua, llevamos a ebullición. Tapamos. Bajamos el fuego al mínimo y salpimentamos levemente. Si veis que los guisantes no sueltan suficiente agua echad más. Cocemos hasta que los guisantes estén en su punto. Corregimos de sal.
Emplatamos colocando los guisantes en un plato hondo y, sobre estos,
una o dos yemas de huevo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario