Entrada
mediterránea en nuestra cocina, moussaka, otro delicioso plato de la cocina
griega en Estoy cocinando... no me olvides. Un plato con el cordero y la
berenjena como protagonistas principales.
Preparación
repleta de sabor y con unos ingredientes que nos aportarán muchos beneficios
para nuestro organismo.
La carne de
cordero es un alimento especialmente rico en proteínas de buena calidad,
contiene la práctica totalidad de los aminoácidos esenciales que necesita
nuestro organismo.
Es
especialmente rico en vitaminas del grupo B y en minerales como el hierro,
fósforo y zinc.
Por su
contenido en minerales, sobre todo por su alto nivel de hierro, es un alimento
interesante en caso de anemia, ya que es un nutriente que forma parte de la
hemoglobina y es fundamental en la formación de las células rojas de la sangre.
Aporta selenio en interesantes cantidades, un mineral que ayuda a combatir los
ataques de asma. También aporta vitaminas del grupo B, fundamentales para el
buen funcionamiento del sistema nervioso.
Las berenjenas
se encuentran entre los alimentos bajos en calorías ya que 100 g. de este
alimento contienen tan solo 21,02 kcal, es recomendable en dietas de
adelgazamiento.
Entre las
propiedades nutricionales de las berenjenas cabe destacar que contiene cantidades
aceptables de hierro, calcio, fibra potasio, yodo, zinc, magnesio, sodio y
contiene vitamina A, B, C, D, E y K.
Con estos
ingredientes y alguno más vamos a preparar esta delicia de la cocina
mediterránea.
INGREDIENTES
500 g de carne
magra de cordero.
3 berenjenas.
1 zanahoria
grande.
1 cebolla
grande o 2 pequeñas.
2 dientes de
ajo.
2 patatas.
3 tomates pequeños
para salsa.
½ cucharada de canela.
Tomillo.
Romero.
Menta fresca.
Vino blanco
Verdejo D. O. Rueda.
25 g. de harina
de trigo.
½ litro de leche.
25 g. de mantequilla.
Queso para
gratinar.
Caldo de ave.
Aceite de oliva
virgen extra.
Sal.
Pimienta negra.
PREPARACIÓN
La receta de moussaka requiere bastante elaboración pero ninguno de los
pasos es dificultoso. Cortamos las berenjenas en láminas gruesas y colocamos
sobre un papel absorbente con un poco de sal para que recoja el agua que
suelten, de esta manera evitamos el amargor. Lavamos para retirar el exceso de
sal y secamos bien. Freímos ligeramente en AOVE. Reservamos.
Picamos la cebolla y la zanahoria en brunoise. Picamos el ajo. Salpimentamos
y pochamos en una sartén con dos cucharadas de AOVE. Posteriormente añadimos
los tomates pelados y troceados.
Cortamos la carne de cordero a cuchillo en dados pequeños. Podéis
utilizar carne picada en máquina pero el resultado no es el mismo.
Freímos la carne en una sartén y la añadimos a las verduras.
Agregamos romero, tomillo, canela, vino blanco y caldo de ave.
Dejamos cocer hasta que el líquido se consuma.
Preparamos una salsa bechamel con harina, mantequilla y leche.
Picamos varias hojas de menta.
En muchas recetas tradicionales de moussaka en Grecia se pone una
primera capa de patatas cortadas en rodajas y fritas. Es la base para la
moussaka.
Sobre las patatas se pone una capa de berenjenas, cubrimos con una
capa de carne y menta picada.
Sobre la capa de carne ponemos otra capa de berenjena y volvemos a extender
carne. Cubrimos con bechamel y horneamos 25 minutos a 180º.
Añadimos el queso y gratinamos 2 minutos a 300º o hasta que adquiera
tono.
Cortamos y emplatamos.
Ya lo tenemos listo para disfrutarlo acompañado de una copa fresca
de vino rosado D. O. Cigales.
Que buena pinta
ResponderEliminarMuchas gracias. Es una receta de mussaka con el éxito asegurado en la mesa.
EliminarSaludos.